La festividad del día de San Nicolas en Praga se celebra cada año en la tarde/noche del 5 de Diciembre previo a la víspera de San Nicolas (en checo, Mikuláš). Muchos viajeros que deciden visitar la Republica Checa se ven sorprendidos ante esta fiesta popular.
Aunque no es única del país checo pues en otros lugares de Europa como Holanda, Bélgica o Austria también se celebra aunque con algunas diferencias.
Día de San Nicolas en Praga
Si te encuentras en Praga y quieres disfrutar del día de San Nicolas, dirígete hacia el centro de la ciudad. Allí encontrarás a personas caracterizadas de San Nicolas acompañados del Demonio (en checo, Čertí) y el Angel (en checo, Anděl).
En este día, las calles del centro de la ciudad se llenan de vida ya que mucha gente aprovecha la festividad de San Nicolas para visitar el recientemente abierto mercado de Navidad de Praga.
¿Cómo se celebra el Día de San Nicolas en Republica Checa?
Esta festividad, considerada por muchos una mezcla entre Navidad y Halloween, tiene los niños checos como protagonistas. Estos, desde muy pequeños crecen conociendo las historias de Mikuláš (en español, San Nicolas).
San Nicolas acompañado por el Demonio y el Angel visitan los hogares de los niños para preguntarles cómo se han portado durante el año. Sí han sido buenos, deberán cantar alguna canción -típicamente folklórica checa- o recitar algún poema, para después ser premiados por el Angel con algunos dulces o golosinas.
En cambio, si los niños se han portado mal, recibirán un saco de carbón. También, el Demonio les asustará con llevárselos en un saco si no cambian su actitud.
Origen del Día de San Nicolas
El origen de la festividad no está clara aunque muchos historiadores coinciden en que es relativamente joven, pues nació entre los siglos XVIII y XIV. En aquel entonces, coincidiendo con el final del curso, los maestros de la escuela se disfrazaban para preguntarles la lección a sus alumnos y además comprobar que su comportamiento ha sido bueno durante todo el año.